TAPA DEL D&Iacute;A Miami se ha convertido en escenario de una pol&eacute;mica in&eacute;dita: el empresario y fil&aacute;ntropo cubano Miguel &ldquo;Mike&rdquo; B. Fern&aacute;ndez ha decidido enfrentar p&uacute;blicamente a Donald Trump y a destacados pol&iacute;ticos republicanos del estado, mediante vallas publicitarias con mensajes directos que denuncian lo que califica como una pol&iacute;tica migratoria &ldquo;cruel&rdquo; y &ldquo;deshumanizante&rdquo;. Entre los lemas que se pueden leer en las calles m&aacute;s concurridas de la ciudad figuran expresiones como &ldquo;Aspirante a dictador&rdquo; junto a la fotograf&iacute;a de Trump, o acusaciones de &ldquo;traici&oacute;n&rdquo; y de ser &ldquo;t&iacute;teres&rdquo; dirigidas a Marco Rubio y a los congresistas cubanoamericanos Mario D&iacute;az-Balart, Mar&iacute;a Elvira Salazar y Carlos Gim&eacute;nez. <p style="text-align: center;"> <p style="text-align: center;">&quot;En una comunidad de inmigrantes. &iquest;d&oacute;nde est&aacute;n las voces que nos protegen?&quot;, dice uno de los carteles en Miami pagado por Miguel B. Fern&aacute;ndez. Fern&aacute;ndez, de 73 a&ntilde;os, naci&oacute; en Manzanillo, Cuba, y lleg&oacute; a Estados Unidos tras escapar del r&eacute;gimen de Fidel Castro. Su experiencia como refugiado y veterano del ej&eacute;rcito estadounidense, donde combati&oacute; en Vietnam, lo impulsa a defender a los inmigrantes que, hoy, enfrentan amenazas de deportaci&oacute;n bajo la administraci&oacute;n Trump. <p style="text-align: center;"> <p style="text-align: center;">&quot;Deportar inmigrantes es cruel&quot;, proclama este cartel en el que aparecen, de izquierda a derecha, Marco Rubio, Mar&iacute;a Elvira Salazar, Carlos Gim&eacute;nez y Mario D&iacute;az-Balart.MBF &ldquo;Lo que est&aacute; pasando en nuestro pa&iacute;s no es correcto y cualquier persona normal lo sabe&rdquo;, afirm&oacute; Fern&aacute;ndez en una entrevista con BBC Mundo, asegurando que su activismo busca proteger a quienes, como &eacute;l en 1964, llegaron en busca de un futuro mejor y hoy temen ser encarcelados o deportados. <p style="text-align: center;"> <p style="text-align: center;">El pasado abril comenzaron a aparecer en puntos estrat&eacute;gicos de Miami unos carteles publicitarios dif&iacute;ciles de pasar por alto para conductores y transe&uacute;ntes.MBF El multimillonario, cuyo patrimonio supera los 1.000 millones de d&oacute;lares, rompi&oacute; con el Partido Republicano en 2016, y desde entonces ha financiado campa&ntilde;as y acciones p&uacute;blicas en defensa de los migrantes, incluyendo anuncios de p&aacute;gina completa en The New York Times y The Wall Street Journal. TAPA DEL D&Iacute;A&nbsp; La campa&ntilde;a de Fern&aacute;ndez no solo busca criticar a Trump, sino tambi&eacute;n exigir responsabilidades a los representantes locales que, seg&uacute;n &eacute;l, toleran o apoyan medidas migratorias que afectan a la comunidad cubanoamericana y latinoamericana en Miami. &ldquo;&iquest;Quieren parar las vallas? los invito: solamente digan la verdad&rdquo;, asegur&oacute;. Las reacciones en la ciudad han sido mixtas: sectores dem&oacute;cratas, republicanos moderados y organizaciones proinmigrantes respaldan la iniciativa, mientras que seguidores de Trump la califican de alineaci&oacute;n con la &ldquo;extrema izquierda&rdquo;. El propio Fern&aacute;ndez sostiene que su motivaci&oacute;n es estrictamente humanitaria y capitalista, centrada en proteger el futuro de su familia y de la comunidad migrante. <p style="text-align: center;"> <p style="text-align: center;">Esta valla financiada por Miguel B. Fern&aacute;ndez atribuye parte de la responsabilidad del pol&eacute;mico centro de detenci&oacute;n &quot;Alcatraz de los Caimanes&quot; a dos de los congresistas cubanoestadounidenses de Miami.MBF Las tensiones generadas por esta campa&ntilde;a tambi&eacute;n han tenido consecuencias personales para el magnate, incluyendo amenazas directas y distanciamientos familiares y sociales, sin que ello haya detenido su cruzada. Adem&aacute;s, ha retirado donaciones millonarias a universidades locales que excluyen a inmigrantes indocumentados de sus programas de becas. &ldquo;Ese no es el pa&iacute;s que yo conozco, no es el pa&iacute;s del cual me siento orgulloso de ser parte, y seguir&eacute; con este proceso expresando mis opiniones&rdquo;, concluy&oacute; Fern&aacute;ndez, reafirmando su compromiso con los inmigrantes y su rechazo a pol&iacute;ticas que considera injustas. La iniciativa de Fern&aacute;ndez ha generado un intenso debate en Miami. Para muchos, representa un llamado urgente a la conciencia c&iacute;vica y humanitaria; para otros, una provocaci&oacute;n pol&iacute;tica que evidencia la polarizaci&oacute;n de la ciudad. Sin dudas, estas vallas marcan un punto de inflexi&oacute;n en la discusi&oacute;n sobre inmigraci&oacute;n en Florida. TAPA DEL D&Iacute;A&nbsp;